FÚTBOL EN PALESTINA
Superficie Puesto 172.º
• Total 6520
km²
Población
total Puesto 125.º
• Censo (2016) 4,816,503
3 hab.
• Densidad 731,76
hab./km²
"la palabra "Palestina" proviene del latín
Palestina (nombre de una provincia romana), y este del griego
"Palaistine" (Herodoto), y este del hebreo P'lesheth (que significa
Filistea, tierra de los filisteos)".
PALESTINA
A comienzos de 2018, un total de 136
estados reconocen a Palestina como un estado soberano.
El Estado de Palestina carece de
independencia de facto.
El Estado de Palestina se divide en dos
grandes regiones: Cisjordania y la Franja de Gaza.
Más de la mitad de los palestinos vive
en otros lugares como refugiados o emigrantes.
El árabe es el idioma oficial
establecido por la Ley Básica Palestina.
La religión mayoritaria es el islam
sunita, seguida por el 90 % de los palestinos.
Las canciones tradicionales no tienen
letras fijas, sino un ritmo fijo, permitiendo improvisar.
La Ley Básica palestina fue promulgada
en 2002 tras su aprobación por Yasir Arafat,
Índice de desarrollo humano (IDH), lugar
en el mundo: 119
La Asociación
Palestina de Fútbol(en árabe: الاتحاد الفلسطيني لكرة القدم)
es el organismo rector del fútbol en Palestina.
Desde 1998 es miembro de la FIFA y la AFC. Organiza
el campeonato de Liga y de Copa de Palestina, así como los partidos de la
selección nacional en sus distintas categorías.
La Asociación de Fútbol de Palestina (Palestine
Football Association o PFA en inglés) fue fundada en 1928 y reconocida por la
FIFA al año siguiente, durante el Mandato británico de Palestina. Contaba solo
con jugadores británicos y judíos, y su consejo de administración solo se
componía de judíos en una época en la que la población judía era minoritaria en
Palestina.
El jugador, profesor de educación física y
traductor en el ejército turco Josef Yekutieli, que había llegado desde Rusia
en 1908 huyendo de los progromos, fue quien impulsó dicha organización.[cita
requerida] En 1930 la selección hizo una gira por Egipto representando
Palestina, con muy poco éxito.
La Liga Premier de
Cisjordania (en inglés: West Bank Premier League, WBPL) es una
de las dos principales divisiones de la Federación de Fútbol de Palestina. La
otra es la Liga de la Franja de Gaza.
Los clubes palestinos tienen una rica historia que
se extiende desde principios de la década de 1920, pero muchos equipos
quebraron debido al conflicto árabe-israelí.1 La liga ha existido en
Cisjordania desde 1977, pero debido a las dificultades asociadas con la
ocupación israelí de Cisjordania y conflictos internos dentro de la Federación
de Fútbol de Palestina, solamente siete temporadas han sido completadas. Con
los años, el formato de la Liga ha tomado muchas formas diferentes. La Liga se
ha disputado de manera ininterrumpida desde 2008. La temporada 2010-11 marcó la
creación de la primera liga profesional en los territorios y vio fichajes de
alto perfil para muchos clubes. En particular, Fadi Lafi (Hilal Al-Quds),
Hernan Madrid (Wadi Al-Nes) y muchos palestinos israelíes que jugaban para
equipos de la segunda y tercera división del fútbol israelí.
Últimos Campeones:
2013-14 Taraji
Wadi Al-Nes SC
2014-15 Shabab
Al-Dhahiriya SC
2015-16 Shabab
Al-Khalil SC
2016-17 Hilal
Al-Quds Club
2017-18 Hilal
Al-Quds Club
2018-19 Hilal
Al-Quds Club
2019-20 Markaz
Shabab Balata
2020-21 Shabab
Al-Khalil SC
2021-22 Shabab
Al-Khalil SC
2022-23 Jabal
Al-Mukaber Club
Equipos más ganadores: Hilal Al-Quds Club con 4,
Taraji Wadi Al-Nes SC y Shabab Al-Khalil SC con 3
títulos.
Copa de Palestina,
últimos campeones:
2013–14 Khadamat Rafah
2014–15 Al-Ittihad Shejaia
2015–16 Shabab Khan Younes
2016–17 Shabab Rafah
2017–18 Shabab Khan Younes
2018–19 Khadamat Rafah
La selección de fútbol de Palestina (en árabe, منتخب
فلسطين لكرة القدم) es el equipo representativo del Estado de Palestina en las
competiciones oficiales.
Datos generales
Código
FIFA PLE
Asociación Asociación Palestina de Fútbol
Confederación AFC
Seudónimo:
Los Leones de Canaan, فرسان (Los Caballeros)
Dir.
técnico Andrés Jalifa (desde 2018)
Capitán Tamer
Salah Captain sports.svg
Más goles Fahed
Attal, Ashraf Nu'man (14)
Más
particip. Ramzi Saleh (68)
Ranking
FIFA Sin cambios 103.º en julio de
2020
→
Mejor lugar 85.º en julio de 2014
→
Peor lugar 191.º en abril de 1999
Estadio Faisal Al-Husseini, Ramala
Primer partido
internacional
Egipto 7:1 Palestina, El Cairo, Egipto — 16 de marzo
de 1934, Clasificación para la Copa Mundial de Fútbol de 1934
Mejor resultado
internacional
Palestina 11:0 Guam, Dhaka, Bangladesh — 1 de abril
de 2006, Copa Desafío de la AFC 2006
Peor resultado
internacional
Egipto 7:1 Palestina, El Cairo, Egipto — 16 de marzo
de 1934, Clasificación para la Copa Mundial de Fútbol de 1934
Palestine
- Record International Players
Appearances
for Palestine National Team
1 Abdelatif Bahdari 82 2007–present
2 Khader Yousef 69 2008–2016
3 Ramzi Saleh 68 2000–2015
4 Abdallah Jaber 59 2014–present
5 Ashraf Nu'man 56 2009–2016
6 Hussam Abu Saleh 53 2010–2015
Musab Al-Battat53 2013–present
Tamer Seyam 53 2014–present
9 Saeb Jendeya 51 1999–2008
10 Mohammed Darweesh 49 2015–present
Goalscoring
for Palestine National Team
1 Fahed Attal 14 2004–2012
Ashraf Nu'man 14 2009–2016
3 Sameh Maraaba 12 2014–present
Tamer Seyam 12 2014–present
5 Oday Dabbagh 11 2018–present
6 Jonathan Cantillana 10 2015–present
Ziyad Al-Kord 10 1999–2006
Khaled Salem 10 2011–present
9 Abdelatif Bahdari 9 2007–present
10 Ahmad Maher Wridat 82011–2018
Abdelhamid Abuhabib82012–2015
Historia del fútbol
palestino: una lucha por el reconocimiento
Introducción: Historia del fútbol palestino: una
lucha por el reconocimiento
Iván Pastor, periodista
Fuente:https://pol-len.cat/fragments/historia-del-futbol-palestino-una-lucha-por-el-reconocimiento/
Fue en las calles de Silwan, uno de los barrios de
Jerusalén este más afectados por la ocupación, donde pude ver realmente cómo la
tragedia palestina tocaba directamente al fútbol, el deporte más popular en los
territorios ocupados. La sede de este club histórico, uno de los fundadores de
la primera liga de fútbol en Cisjordania y cuya camiseta tiene los colores de
la bandera palestina, estaba rodeado de casas de colonos israelíes. Además,
debido a que los palestinos sin residencia en Jerusalén no pueden entrar a la
ciudad, tienen que jugar y entrenar en un estadio a las afueras de Belén. De
este modo, tanto en el Silwan como en otros clubes de Jerusalén hay jugadores
que nunca han pisado la ciudad del equipo en el que juegan.
El fútbol, como cualquier otro ámbito, ha sido
utilizado en la estrategia del sionismo para apropiarse del territorio
palestino. Este deporte fue introducido en Palestina a finales del siglo XIX
por las escuelas de misioneros que se instalaron a lo largo del territorio, y
en 1908 se formaron los dos primeros clubes en Jerusalén. Sin embargo, no es
hasta la llegada de los británicos en 1920 cuando empieza a desarrollarse.
Además de que las propias instituciones de la Corona Británica allí asentadas
como el Ejército, la Policía o la Aviación crearon sus propios clubes, se
crearon muchas asociaciones juveniles que empezaron a incluir el fútbol como
una actividad más. A finales de los años 20, el fútbol era ya el deporte más
popular junto al boxeo.
Tras la Declaración de Balfour en 1917, las organizaciones
sionistas vieron en el deporte una buena herramienta para reafirmar su
identidad en el territorio, y crearon clubes deportivos contra los que venían a
jugar otros equipos judíos de todo el mundo, unos partidos que provocaron
muchas protestas por jugarse bajo la bandera sionista. Sin embargo, el golpe de
efecto vendría cuando la asociación deportiva internacional Maccabi invitó a
clubes judíos y árabes a conformar una Asociación de Fútbol de Palestina (PFA
por sus siglas en inglés), a la que se unieron 15 clubes sionistas y uno árabe,
cuyo nombre no volvió a salir más en ningún documento. Esta federación pidió la
admisión en la FIFA, que la reconoció oficialmente en 1929. De esta manera, la
organización del fútbol en el territorio y su representación internacional
quedaba en manos sionistas. Esta asociación en la que no tenían voz los clubes
árabes, que representaban al 75% de la población palestina, adoptó el hebreo
como lengua e incorporó la estrella de David en su logo.
Como contrapeso a esta asociación, cristianos y
musulmanes crearon en 1931 la Federación Deportiva Palestina (PSF por sus
siglas en inglés). Entre tanto, ya había una liga en la que competían clubes
árabes, judíos y británicos cuyo primer vencedor fue el equipo de la policía
británica en 1932. Sin embargo, tras la revuelta de 1936, muchas actividades
deportivas relacionadas con la PSF fueron suspendidas, algunos clubes cerrados
y sus dirigentes arrestados. El debilitamiento del movimiento deportivo originó
que en 1944 fuera restablecida la PSF árabe dividida en comités regionales,
esta vez con la condición de que no tuvieran relación con ninguna organización
judía. Se jugaban ligas regionales cuyos campeones competían entre sí, y de 25
clubes que empezaron llegaron a ser 60 en 1947.
Aunque de forma no oficial, el primer precedente de
una selección propiamente palestina se remonta a marzo de 1947, cuando un
combinado de la PSF jugó un partido contra jugadores de la aviación y el
ejército británicos. Hasta ese momento, los encargados de representar a
Palestina en campeonatos internacionales, como sucedió en el clasificatorio
para el Mundial del 34 y en el del 38, fueron los sionistas, con un equipo
conformado solo por jugadores judíos bajo el nombre Eretz Israel/Palestine. El
fútbol fue una pieza más del contexto político y la estrategia sionista para
mostrar internacionalmente el ‘carácter judío’ de Palestina.
Desde su restablecimiento en 1944, la PSF luchó por
ser reconocida por la FIFA con escaso éxito. Representantes egipcios, libaneses
o yugoslavos apoyaron el reconocimiento de esta federación, sin embargo la
mayoría de la FIFA denegó su entrada en una época de escalada del conflicto
entre árabes y judíos… hasta que llegó 1948.
Tras la conocida Nakba (desastre), que supuso la
expulsión de 700 000 palestinos de sus tierras, se produjo un retroceso total
en el desarrollo deportivo. La infraestructura fue destruida, la PSF
suspendida, muchos jugadores perdieron su vida o fueron forzados a vivir en
campos de refugiados en Líbano, Siria, Jordania, Gaza o Cisjordania.
Es en esta nueva situación donde se crean varios
clubes sociodeportivos, muchos de ellos en los campos de refugiados. Solo unos
pocos fueron instituciones meramente deportivas, ya que otro tipo de
actividades sociales que se llevaban a cabo eran más importantes. Estos clubes,
como parte de un servicio social, contaron con mucha ayuda por parte de la
UNRWA, el organismo de la ONU responsable de los campos de refugiados
palestinos. En el de Tulkarem, al norte de Cisjordania, se creó en 1956 el
Markaz Shabab Tulkarem (Centro Juvenil Tulkarem).
Los clubes que estaban bajo control jordano pasaron
a la Federación Jordana de Fútbol, que no les reportó mucha ayuda, y muchos
jugadores se convirtieron en miembros activos de otros equipos jordanos. De
hecho, el Al Wehdat, reciente campeón de la liga jordana y uno de los clubes
con más palmarés, tiene su origen en uno de los campos de refugiados palestinos
de Amman y es muy seguido por la comunidad palestina. Por otro lado, los clubes
creados en Gaza, bajo control egipcio, contaron con mucha más ayuda de la
Federación Egipcia y tuvieron un desarrollo mucho mayor, por lo que cuando
jugaban partidos internacionales la selección estaba compuesta en su mayoría
por jugadores gazatíes.
Este combinado nacional palestino solo estaba
reconocido por las federaciones de fútbol árabes, y por primera vez compitió en
1953 en los Juegos Panárabes de Alejandría perdiendo por 1–8 contra Egipto.
Posteriormente compitió en la GANEFO (Juegos de las Potencias Emergentes) y las
sucesivas ediciones de la Copa Árabe. La Asociación Palestina de Fútbol (PFA),
tal y como se la conoce actualmente, fue creada en 1962, ya que la anterior PFA
reconocida por la FIFA, cambió su nombre a Asociación Israelí de Fútbol en
1948.
Dentro de los clubes sociodeportivos, el fútbol era
otra herramienta más de identidad nacional, y se jugaban partidos amistosos a
nivel regional. La palabra ‘Palestina’ y su bandera estaban perseguidas tras la
ocupación israelí en 1967, por lo que los partidos eran una oportunidad más de
exhibir esos símbolos. Como muchas de las actividades que pueden parecer
rutinarias, los partidos tenían una importancia social, patriótica, deportiva y
cultural. Muchos de ellos eran interrumpidos por cánticos o acababan en manifestaciones
contra el ejército israelí. En ausencia de una estructura estatal, los clubes
contribuían a mantener la identidad nacional con muchas actividades al tener
otras ramas culturales y sociales además de las deportivas. Muchos fueron
cerrados en 1967, como el Markaz Tulkarem, que no volvió a retomar sus
actividades hasta 1970. Sin embargo, la clausura de clubes será una tónica en
la historia del fútbol palestino, ya que durante las dos intifadas las ligas se
pararon, los clubes fueron clausurados y muchas sedes tomadas y destruidas por
el ejército israelí. Entre 1988 y 1991 se paró la competición, lo mismo que
entre 2000 y 2007.
Hasta 1978 en Gaza y 1980 en Cisjordania se jugaban
partidos en competiciones regionales, y a partir de esa fecha se idea una liga
regular que será muy variable en su composición y en su continuidad. El Markaz
Tulkarem, como uno de los clubes históricos de Cisjordania, estuvo presente
desde sus inicios, y solo ha estado en segunda división en el periodo 2013–16 y
en 2017. Su palmarés es escaso: una liga en el 84 y una copa Yaser Arafat en
2005, a la que habría que añadir una liga en el 86 que finalizó abruptamente
cuando el Markaz iba primero.
Tras la creación de la Autoridad Nacional Palestina
en 1994, la Asociación Palestina de Fútbol es admitida por la FIFA cuatro años
más tarde. De todos modos, el fútbol palestino no empieza su introducción al
‘profesionalismo’, es decir, con patrocinadores y jugadores asalariados, hasta
2008, fecha clave a nivel nacional y de clubes ya que es el primer año en el
que arranca una liga regular en Cisjordania, otra liga de fútbol indoor
femenina, y la Selección Nacional Palestina juega su primer partido como local
en un amistoso contra Jordania en el recién construido estadio Faisal Al
Huseini de Al Ram. Por último, en 2011 arranca una liga femenina de seis
equipos y Palestina juega sus primeros partidos oficiales en casa en el
clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y para el Mundial de
Brasil 2014. En 2014 logran clasificarse por primera vez para una competición
internacional, la Copa Asia.
En la liga de Cisjordania –no podemos hablar de una
única liga palestina ya que se juega otra en Gaza– existen casos de clubes
curiosos como el de Uadi Al Nes. Este club, perteneciente a un pueblo de 900
habitantes del mismo nombre, ha ganado tres veces la liga palestina, y todos
sus habitantes son de la misma familia, los Abu Hamad. Salvo el entrenador y
cuatro jugadores, el resto de la plantilla son vecinos y familiares. Ahora
juegan tres hermanos y otras dos parejas de hermanos, aunque hace pocos años
llegaron a jugar once hermanos de una familia de 18. Otra cuestión destacable
del fútbol palestino es la participación de unos pocos jugadores chilenos en
los clubes más potentes, debido a la numerosa inmigración palestina en el país
latinoamericano. Uno de esos jugadores que hasta hace tres años jugaba en
Cisjordania, Roberto Kettlun, fue en 2018 director deportivo del CD Palestino,
un equipo de la Primera División chilena fundado por exiliados palestinos.
A pesar de la consolidación de una liga regular, ser
futbolista en Palestina no está exento de todas las consecuencias de la
ocupación israelí, como han sufrido varios jugadores en la historia reciente.
Es el caso de Ziad Al Kurd, delantero de la selección que al regresar de un
partido de clasificación para el Mundial contra Uzbekistán en 2004 encontró su
casa destruida y le fue impuesta una prohibición de viajar al extranjero; Tariq
al Quto, prometedor centrocampista asesinado en Gaza en 2004; Shadi Sbaje,
Uajeh Moshtahe y el internacional palestino Ayman Alkurd, asesinados en la
Operación Plomo Fundido sobre Gaza en 2008; el exinternacional y entrenador
Ahed Zaqut, asesinado tras el impacto de una bomba en su casa de Gaza; Mahmud
Sarsak, encarcelado bajo detención administrativa en 2009 durante tres años
tras ser acusado de pertenecer a la Yihad Islámica y liberado tras una huelga
de hambre y la presión internacional de la FIFA; Omar Abu Ruayis, portero de la
selección olímpica palestina detenido en 2012 por ser sospechoso de pertenecer
a una célula terrorista; Sameh Maraaba, un joven internacional encarcelado
durante ocho meses al volver de un entrenamiento en Catar por pasar
supuestamente información a Hamás; o Daud Alradaya, el portero del Markaz
Tulkarem, encarcelado durante un mes por no tener su identificación al salir de
Jerusalén este.
Para tener más información acerca del fútbol en
Palestina y poder realizar este libro, recorrí durante tres semanas
Cisjordaniavisitando equipos y viendo partidos. Visto en perspectiva, creo que
la elección del Markaz Tulkarem no pudo haber sido más certera, sin embargo el
panorama del fútbol palestino con sus tragedias y sus anécdotas es muy amplio.
No puedo evitar acordarme del Shabab Al Jalil, el Real Madrid palestino,
cambiándose en el vestuario del estadio de Al Khader decorado con dibujos
animados como si fuera una guardería; de los vecinos de Nilin, un pequeño
pueblo junto al muro con una cancha de cemento donde juegan ocho pueblos de
alrededor, y como para jugar en un campo de hierba (siempre artificial) hay que
alquilar un campo en Ramala, muchas familias prohíben a sus hijos desplazarse
por miedo a los checkpoints; o de las chicas del Diyar, el equipo femenino de
la ciudad de Belén y un espacio no solo deportivo sino interdisciplinar de
reivindicación de los derechos de las mujeres.
Desde los rezos de toda la grada en los descansos,
los policías jugando en la portería mientras se cambian los jugadores, los
lanzamientos de objetos o el calificativo de ‘comepipas’ reflejado allí de
forma literal en los estadios, son curiosidades que me vienen a la cabeza,
aunque la principal de todas ellas sea que el fútbol palestino lucha por seguir
su rumbo con ‘normalidad’ bajo el yugo de la ocupación israelí.